El consumo crónico de la cocaína acelera el envejecimiento del cerebro, según un estudio del Instituto de Neurociencia Clínica de la Universidad de Cambridge publicado en la revista Molecular Psychiatry. Concretamente, las imágenes de resonancia magnética revelan que la pérdida de materia gris cerebral es mayor en personas dependientes de esta droga que en el resto de la población. Cuando envejecemos, el cerebro mengua de tamaño. Según los autores del estudio, en las personas sanas la reducción del volumen cerebral es de 1,69 mililitros al año. Sin embargo, en quienes han consumido cocaína siendo adultos, la cifra asciende a 3,08 mililitros anuales. Esta aceleración en la pérdida de masa cerebral ligada al envejecimiento ocurre sobre todo en la corteza prefrontal y en la corteza temporal, zonas relacionadas con la atención, la toma de decisiones, el autocontrol y la memoria.
Según cálculos recientes de las Naciones Unidas, el número de consumidores de cocaína en el mundo asciende a 21 millones de personas, de las cuales al menos el 1% son drogodependientes. “Las personas jóvenes –y los adultos- que consume cocaína deben ser informadas de los riesgos de envejecimiento prematuro a largo plazo”, concluye Karen Ersche, coautora del estudio.
Victor Godoy
De sobra es sabido por todos que la cocaína es una de las drogas más peligrosas y adictivas de las que existen, que cuando son consumidas a largo o medio plazo, sus consecuencias pueden ser impredecibles, creo(a mi juicio)que tanto el consumo constante, como el esporádico durante años o meses de cocaína; Tiene la misma peligrosidad, ya que una vez leí en otro articulo similar, que cuando una persona consume (aunque sea poco), las sustancias de las que consta la cocaína se concentran y permanecen alrededor de 15 días en el cerebro,hasta la completa desaparición del mismo. Sabemos que todas las drogas afectan de una manera más o menos agresiva al cerebro ( por ej la marihuana que provoca pérdida de capacidad de memoria), pero la cocaína por su composición es sin duda un autentico "come cocos".Yo creo que tanto los consumidores como los que no lo son, saben de sobra los efectos perjudiciales de la cocaína, otra cosa es que no quieran saberlo, pero la única solución que se encuentra para la persona que pueda acabar con este problema, es sin duda "la voluntad", tanto para el que decide no probarla aún teniendola al alcance de su mano, como al que consume habitualmente que al principio de su adicción es consciente de lo que ello le va a conllevar mientras consume ( o al menos eso creo). Las palabras marihuana, chocolate, alcohol, porros...ect. Son palabras que cuando las oímos no nos suelen producir mucha impresión o asombro, tal vez porque estamos demasiado habituados a oírlas, o porque simplemente creemos que no son tan perjudiciales como otras (que también es cierto comparadas con la cocaína o la heroína), pero en contra la palabra cocaína ya es una palabra mayor, que al oírla, esta sí que ya nos crea otro tipo de asombro e inquietud, tal vez porque todos sabemos que eso si que es una "droga dura". Aún así el problema nace y radica principalmente en uno muy corto, resumido y difícil de controlar: el acceso tan fácil que hay para conseguirla en cualquier parte de este mundo globalizado.
ResponderEliminarFdo: Alberto.